Mercados tradicionales de alimentos en América Latina y el Caribe

Programa de modernización de mercados tradicionales de alimentos en América Latina y el Caribe

Los mercados tradicionales de alimentos son importantes espacios económicos y sociales de interacción entre el mundo rural y urbano. En donde se desarrollan labores de comercialización, distribución, logística y de consumo de alimentos y productos, que los sitúa como una instancia estratégica para los sistemas agroalimentarios.

Cumplen un rol significativo en garantizar el acceso al mercado de los pequeños agricultores y la agricultura familiar, así como promover la seguridad alimentaria y una adecuada nutrición de los hogares, en especial de aquellas familias de más bajos recursos. Su rol no sólo se limita al abastecimiento,  también cumplen múltiples funciones sociales, económicas y culturales en los territorios en donde están insertos, además, de ser espacios que permite la interacción, el intercambio de conocimientos y el aprendizaje de buenas prácticas.

Generan un contexto adecuado para que los consumidores tomen sus decisiones sobre adquisición, preparación y consumo de alimentos aportando al rescate y valorización de la cultura alimentaria.

Visibilizar la labor que desempeñan los mercados tradicionales de alimentos es clave, en especial a lo referente a la generación de ambientes alimentarios adecuados, así como una instancia articuladora dentro de la cadena agroalimentaria, por lo que es esencial incorporarlos en el desarrollo de estrategias integrales de recuperación pos pandemia.

La importancia de los mercados tradicionales de alimentos se revela en varios aspectos de la economía y la sociedad urbana
  • Tienen una alta rotación comercial, son grandes empleadores y son un notable multiplicador económico.

 

  • Son excelentes incubadoras de negocios y apoyan la creación de empresas. Crean entornos económicos multipropósito y multiescala, promoviendo el comercio y la competencia. A través de los mercados tradicionales de alimentos, las pequeñas y microempresas tienen acceso directo no solo a los consumidores individuales, sino también a las grandes empresas a las cuales proveen productos;

 

  • Son lugares de innovación y experimentación. Los bajos costos operativos, la pequeña escala, la disponibilidad de puestos de comida y la fluidez de los mercados alientan a los comerciantes a experimentar con ideas y productos que pueden no ser accesibles en otros lugares;

 

  • Apoyan al desarrollo económico intergeneracional e intrageneracional. Muchos de los mercados tradicionales están conformados por comerciantes que emplean a miembros de la familia a tiempo parcial o completo;

 

  • Contribuyen económicamente a las actividades locales de los entornos en donde se encuentran ubicados, al ofrecer oportunidades de empleo y contribuir a que otras empresas puedan desarrollarse en la actividad comercial, principalmente aquellas relacionas con el suministro  de productos agropecuarios;

 

  • Los precios de los mercados son consistentemente más bajos que los de los supermercados;

 

  • Los mercados son espacios de encuentro donde las personas de diferentes ingresos, edades, géneros y culturas pueden reunirse e interactuar. Facilitan la cohesión e inclusión social;

 

  • Son cruciales para la identidad distintiva de una ciudad o área, ya que involucran a personas de la comunidad y su cultura;

 

  • Promueven la sostenibilidad, la seguridad alimentaria y la salud de la comunidad;

 

  • Aportan al turismo y a la gastronomía local.

 

    Es por esta razón que es importante prestar atención a los desafíos que enfrentan los mercados tradicionales de alimentos, muchos de ellos son de carácter interno y están determinados por factores como infraestructura, la gobernanza, la digitalización y el uso de tecnologías para la comercialización de alimentos, el manejo de los residuos, aspectos socio organizativos, entre otros.

    A esto se suman factores externos derivados de las condiciones de las infraestructuras urbanas, saneamiento, contaminación ambiental y acústica y otros aspectos en el entorno de las zonas donde se instalan.

    El desarrollo y modernización de los mercados tradicionales de alimentos es un proceso complejo

    Involucra a diversos interesados con objetivos diferentes. Apoyar este proceso de mejora requiere un enfoque que valoriza las particularidades de cada mercado y su contexto como son:

    1. El estado de la economía alimentaria
    2. La madurez y peculiaridad de la cadena de suministro
    3. Los marcos legales y fiscales existentes
    4. Además, implica que los actores, procesos e infraestructuras deben adaptarse a las cambiantes características de la demanda alimentaria de la población y a la necesidad de las innovaciones.

    La FAO junto a sus contrapartes en América Latina y el Caribe trabaja en la implementación de una agenda de modernización de los mercados tradicionales de alimentos impulsando acciones que son fundamentales para que estos actores sean eficientes en su gestión.

    Las acciones de modernización para los mercados tradicionales de alimentos que se están impulsando buscan:

    1. Adoptar los principios de economía circular en la definición del modelo operativo, reduciendo la generación de residuos, optimizando el uso de agua y energía eléctrica a partir de fuentes renovables y promoviendo la reducción de pérdidas y desperdicios de alimentos a través, por ejemplo, de bancos de alimentos y programas de recuperación de alimentos.
    2. Establecer estándares y procedimientos operativos que promuevan la inocuidad de los alimentos, la limpieza del ambiente comercial, el control de plagas y zoonosis.
    3. Adecuar las instalaciones del mercado para funcionar como plataforma logística, controlando el flujo y horario de camiones, ordenanza computarizada y registro de todas las transacciones que se realicen en el espacio físico o virtual de los mercados.
    4. Usar empaques estándar específicos para cada producto, preferiblemente con etiquetas desechables y/o electrónicas con validez nacional con toda la información del producto.
    5. Incorporar información sobre el origen del producto, fecha de cosecha o producción y fecha de envasado para garantizar su trazabilidad. Estandarizar los productos frescos comercializados en los mercados por tipo, tamaño, color y maduración.
    6. Crear o mejorar una plataforma digital con información sobre precios de productos “en tiempo real”, según su clasificación, cantidades comercializadas y precios practicados en otros mercados.
    7. Instalar o modernizar la cadena de frío para la preservación de la calidad de los productos en venta (mercados mayoristas, centros de abasto mixtos y minoristas).
    8. Crear espacios comerciales dedicados a la comercialización de productos de la agricultura familiar y de la Pymes, favoreciendo la inclusión en los circuitos comerciales de nuevos productores y nuevas regiones.
    9. Capacitar al personal técnico de los Mercados Mayoristas y de los establecimientos minoristas y ferias para que desarrollen nuevas funciones administrativas y operativas generando indicadores sistemáticos.
    10. Adoptar una política de transparencia en las transacciones realizadas, con informaciones en tiempo real sobre precios y cantidades, además de la comunicación directa con los productores – y con los comerciantes – con equipos de nutricionistas y técnicos de ventas.
    11. Mejora de la gobernanza, la inclusión de los diferentes actores tanto políticos, económicos, municipales, locales y gubernamentales y la participación de los operadores del sector privado son clave para procesos operativos exitosos, además, del posicionamiento de estos actores en las agendas políticas.

    La responsabilidad de los mercados tradicionales de alimentos, por mantener el suministro de las ciudades creció a raíz de la pandemia provocada por la COVID-19 y ahora son fundamentales para hacer frente al escenario global del alza de precios de los alimentos. Es por ello que su gran desafío es modernizarse de manera inclusiva y transparente.

    Aporte de los mercados tradicionales de alimentos a los Objetivos de desarrollo sostenible

    La importancia de los mercados tradicionales de alimentos fue relevada durante el período crítico de la pandemia y, actualmente, frente al alza global de los precios de los alimentos, al garantizar el abastecimiento de alimentos en especial a nivel urbano.

    Los escenarios recién mencionados, han hecho que estos asuman nuevas características operacionales, modernicen sus sistemas de comercialización y optimicen sus prácticas sanitarias, para atender de forma eficiente a los desafíos que se han presentado en los últimos años.

    Por esto y otras razones, los mercados tradicionales de alimentos aportan de manera crucial al cumplimiento de los diferentes Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).

    A continuación, se muestra el aporte de los mercados tradicionales de alimentos a los ODS, con ejemplos concretos desarrollados en la región.

    ODS 2
    ODS 2

    "Hambre Cero".

    • Los mercados mayoristas de alimentos de la región distribuyen más del 70% de la producción agrícola en México, el 80% de las verduras frescas en Argentina y el 90% de las frutas que se consumen en Chile (Intini, Belik, Cunha y Torres, 2020).
    • Un 59% de los mercados tradicionales de alimentos de la región realizan donaciones de alimentos para ayuda humanitaria y 46% realizan donaciones para Bancos de Alimentos (FAO-FLAMA 2020d, Boletín 5).
    • Mercados mayoristas de Lo Valledor, en Chile; Ceasa-Campinas, Ceasa-SC, Ceasa-Ce y Nova Ceasa en Brasil, Mercadom en Costa Rica, desarrollan iniciativas de apoyo para mejorar la alimentación escolar (FAO-Flama 2020).
    ODS 9
    ODS 9

    "Industria innovación e infraestructura".

    • La reacción de los mercados mayoristas a las medidas de combate a la pandemia ha sido de estabilidad. De acuerdo con la información recabada, la mayoría de los mercados consideraba que la oferta de tubérculos (77%), hortalizas (71%), cárnicos y pescados (70%), legumbres (57%) y granos (56%) se ha mantenido estable ((FAO-Flama 2020c Boletín 2).
    • En ALC, 16 países de la región cuentan con sistemas de información para actividades comerciales, que registran precios diarios de productos hortofrutícolas vendidos en 122 mercados mayoristas de alimentos (FAO-Flama 2020c, Boletín 4).
    • En la actualidad, los mercados tradicionales de alimentos han implementado nuevos procesos comerciales, muchos de estos introducidos durante la pandemia provocada por la COVID 19, como el uso de aplicaciones y formas digitales para transacciones entre productores y comerciantes y entre ellos y el público en general. Un 73% de los mercados mayoristas de ALC usan de plataformas digitales para realizar transacciones.
    ODS 11
    ODS 11

    "Ciudades y Comunidades sostenibles".

    • Los mercados tradicionales de alimentos estimulan la creación, en sus inmediaciones, de servicios básicos para su funcionamiento, como bares, restaurantes, gasolineras, bancos y talleres de mecánica, en cerca del 80% de los casos.
    • Los mercados tradicionales de alimentos medianos y grandes de la región fomentan el funcionamiento de un número significativo de establecimientos de apoyo logístico en su entorno, ofreciendo servicios directamente vinculados al negocio mayorista.
    • Los comerciantes son agentes comerciales que actúan en varios eslabones de la cadena de comercialización, con negocios que involucran la producción de alimentos, así como eslabones posteriores de la cadena comercial asociados al comercio minorista.
    • La CEDA en La Ciudad de México, el Mercado Central de Buenos Aires y Corabastos en Bogotá son ejemplos de Mercados Mayoristas de Alimentos (MMA) regionales que desarrollan proyectos de economía circular en alianza con instituciones nacionales para reúso de agua y ahorro de energía.
    • Mercados Mayoristas de Riobamba, Ecuador, Dama en Paraguay, Neuquén en Argentina, Ceasa-Campinas en Brasil desarrollan proyectos de recuperación de alimentos y compostaje.
    ODS 12
    ODS 12

    "Producción y consumo responsables".

    • 58 MMA de la región cuentan con Bancos de Alimentos directamente en sus instalaciones o establecen acuerdos de cooperación. Además, un total de 24 MMA hacen donaciones a Banco de Alimentos ubicados fuera de los sitios web de los Mercados (FAO-Flama 2020d Boletín 5).
    • 14 MMA de Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica y Uruguay desarrollan y publican calendarios de oferta y precios estacionales para productos frescos, lo que permite a los consumidores tomar decisiones saludables de consumo a un costo menor.
    ODS 17
    ODS 17

    "Alianzas para lograr los objetivos".

    • Un 33% de los mercados mayoristas de alimentos de la región establecen acuerdos con programas de compras públicas nacionales (FAO-Flama 2020c, Boletín 3).
    • Los MMA de Argentina, Brasil, Colombia, Costa Rica, Ecuador, México, Panamá, Paraguay, Perú y Uruguay establecieron convenio de cooperación técnica con Ministerios y agencias nacionales de agricultura y desarrollo agrario para el avance y la modernización de los MMA.
    • Los mercados mayoristas de Ecatepec, en México, Ceagesp y Ceasa-RJ en Brasil firmaron mecanismos de cooperación técnica con Universidades para evaluación y desarrollo de proyectos de abastecimiento alimentario.
    • Los MMA de Buenos Aires crearon un acuerdo innovador de cooperación y articulación con las autoridades públicas, la Mesa Provincial, para articular acciones que promuevan una coordinación del suministro de alimentos en la metrópolis.