Gestión sostenible de la captura incidental en la pesca de arrastre de América Latina y el Caribe

Estudio sobre la cadena de valor de las capturas incidentales en la Pesquería de Arrastre de Camarón en Trinidad

Como parte del plan de trabajo del proyecto REBYC II LAC en Trinidad y Tobago, la Universidad de las Indias Occidentales realizó un estudio para comprender los impactos económicos, sociales y ambientales derivados de las prácticas actuales de la flota de arrastre de camarones. En el caso particular de Trinidad es necesario reducir la captura incidental de las pesquerías de arrastre de camarones utilizando artes modificadas para aumentar la eficiencia en las operaciones y las ganancias de los pescadores. Por otra parte, comunidades como Otaheite y Orange Valley, que dependen en gran medida de la captura incidental en el arrastre de camarones, son vulnerables debido a su alta dependencia de los desembarques para la seguridad alimentaria, la generación de ingresos y el empleo. Por lo tanto, el objetivo general de este estudio fue proporcionar una plataforma para una mejor comprensión del sector de la pesca de camarones de arrastre de fondo y su impacto en los medios de vida de estas dos comunidades piloto en Trinidad y Tobago.

Los resultados de este estudio muestran que, en general, se descarta una estimado de 50,800 peces comerciales y no comerciales por viaje por arrastrero comercial de doble aparejo (también conocido como arrastrero Tipo IV). El peso de descarte es significativo, con aproximadamente el 84% de la captura total; mientras que los peces juveniles descartados representaron casi el 70% del número total de peces descartados, todo lo cual tiene importantes implicaciones en términos de pérdidas de potenciales ganancias. El valor de mercado total del pescado comercial descartado para un arrastrero de doble aparejo se estimó en TT $ 18.596 por viaje, de los cuales el salmón blanco representaba aproximadamente el 51,7% del valor total, seguido de bagre (5,8%), róbalo (4,9%) y sardina (3,8%). Basado en un promedio anual de 3,125 viajes (de 2006 a 2014) se pierden al año aproximadamente TT $ 58,114,750 en descartes comerciales en la pesquería de arrastre de camarones, y esto solo de los arrastreros Tipo IV.

En 2018, la contribución del Sector de Agricultura, Silvicultura y Pesca fue de TT $ 738.3 millones al PIB de Trinidad y Tobago. Por lo tanto, la pérdida estimada producto de los descartes comerciales representó el 7,9% del valor del Sector de Agricultura, Silvicultura y Pesca para 2018. Sin embargo, si se permitiera que los peces comerciales juveniles descartados alcanzaran la madurez y luego se comercializaran, esto equivaldría a más de TT $ 207 millones cada año, lo que se traduce en aproximadamente el 28.1% de la contribución del Sector de Agricultura, Silvicultura y Pesca al PIB de 2018. Por lo tanto, se necesitan acciones urgentes para implementar el uso de dispositivos efectivos de reducción de captura incidental. Esto mejorará la sostenibilidad de la cadena de valor, ya que es muy probable que los descartes estén causando una reducción significativa de captura de especies comerciales en los próximos años.

En cuanto a empleos y seguridad alimentaria, los desembarques combinados de captura incidental de arrastre en Otaheite y Orange Valley ascienden a más de 45 toneladas, de las cuales el 8,2% se entrega a amigos y familiares, que se encuentran principalmente en la comunidad pesquera local (según los datos recibidos de los pescadores). Los pescadores también se llevan a casa el 2,4% de estos desembarques de captura incidental para su consumo. Se estima que el 23% de los desembarques de captura incidental se venden en el muelle de Orange Valley, el cual no es formalmente un lugar para la comercialización. De las ventas formales en el mercado, el 50% son realizadas por pescadores que venden directamente a revendedores minoristas. El otro 50% se vende a mayoristas. Se estima que solo el 1.9% de la captura incidental se procesa comercialmente y solo el 0.2% se procesa informalmente. En términos de roles y género, la participación en la cadena de valor de la pesca de arrastre de camarones está dominada en gran medida por los hombres. Sin embargo, en cuanto a la provisión de insumos, las mujeres participan en gran medida en la venta de hielo, tanto para las embarcaciones como para la comercialización en tierra. De igual forma, en el Mercado Municipal el 25% de los vendedores encuestados eran mujeres, las cuales administraban sus propios puestos.

El estudio también arrojo que las oportunidades de capacitación y participación en la fabricación de productos de valor agregado, como pescado salado o ahumado, deberían estar enfocadas en la capacitación dentro o cerca de las comunidades, especialmente para las mujeres, ya que tienen otras responsabilidades familiares que les impiden abandonar la comunidad por períodos prolongados de tiempo. La gestión a largo plazo requiere, por lo tanto, la preparación de un Plan de Manejo de la captura incidental de arrastre de camarones; de hecho, se recomienda que este Plan tome en cuenta, entre otros factores, medidas para abordar algunas de las brechas clave a lo largo de la Cadena de Valor de la Captura Incidental de la Pesca de Camarón.

Las recomendaciones clave de este estudio se centraron en la capacitación de los actores pesqueros en la producción de productos secundarios de valor agregado, como pescado salado y ahumado; mejoras en el mercado mayorista en Otaheite; la utilización del mercado minorista en Otaheite (actualmente sin usar, pero con instalaciones adecuadas), la introducción de normas de salud y seguridad en la industria; la recopilación adecuada de datos de captura y comercialización y la promoción del uso de desechos provenientes de las capturas para producir harina de pescado.

28/05/2020
Trinidad and Tobago