Pérdidas y desperdicio de alimentos
Coalición “La comida no es nunca un desperdicio”
Puesta en marcha por un grupo de asociados durante la Cumbre de las Naciones Unidas sobre los Sistemas Alimentarios.
La magnitud del problema de las pérdidas y el desperdicio de alimentos
Alrededor del 14 % de los alimentos del mundo, valorados en 400 000 millones de USD anuales, se pierden en la cadena de suministro tras ser cosechados, antes de llegar a los comercios minoristas, mientras que otro 17 % —aproximadamente 931 millones de toneladas de alimentos— acaba siendo desperdiciado en los comercios minoristas y por los consumidores. Gran parte de ese desperdicio de alimentos tiene lugar en los hogares.
La pérdida y el desperdicio de alimentos conllevan una presión innecesaria sobre el medio ambiente y sobre los recursos naturales utilizados para producirlos en primer lugar. En esencia, significa que se han desperdiciado recursos de la tierra y el agua, se ha generado contaminación y se han emitido gases de efecto invernadero (GEI) sin ningún motivo.
La coalición “La comida no es nunca un desperdicio” se puso en marcha en Roma en 2021, durante los actos previos a la Cumbre de las Naciones Unidas sobre los Sistemas Alimentarios, para impulsar la Agenda 2030 con el fin de acelerar el ritmo de reducción de las pérdidas y el desperdicio de alimentos tras la Cumbre y lograr así la meta 12.3 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
Para ello, a través de sus iniciativas en pro de la consecución de la meta 12.3 de los ODS, la coalición pretende:
- reducir a la mitad el desperdicio de alimentos para 2030 y reducir las pérdidas de alimentos en al menos un 25 %;
- crear sistemas alimentarios más sostenibles y resilientes que traten de reducir al mínimo las pérdidas y el desperdicio de alimentos;
- establecer y reforzar la colaboración entre los Estados miembros y las organizaciones en todos los sistemas alimentarios, para garantizar el aprendizaje y el intercambio de buenas prácticas;
- promover la inversión en la reducción de las pérdidas y el desperdicio de alimentos.
“Meta 12.3 de los ODS: De aquí a 2030, reducir a la mitad el desperdicio de alimentos per cápita mundial en la venta al por menor y a nivel de los consumidores.
Y reducir las pérdidas de alimentos en las cadenas de producción y suministro, incluidas las pérdidas posteriores a la cosecha”.
Compromiso #123 Pledge para reducir las pérdidas y el desperdicio de alimentos: la primera iniciativa de la coalición
El compromiso #123 Pledge, que se puso en marcha durante la 27.ª Conferencia de las Partes en la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP 27), es la primera iniciativa de la coalición. El compromiso “123 Pledge” está coordinado por la coalición Champions 12.3, el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO). También cuenta con el apoyo del Programa de acción sobre desperdicio y recursos (WRAP), el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) y Rabobank.
La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) se complace en invitar a gobiernos, empresas, instituciones y particulares a que se comprometan a armonizar sus programas de acción para reducir a la mitad el desperdicio de alimentos para 2030 y disminuir las pérdidas de alimentos en al menos un 25 %, con el fin de acelerar las medidas para el logro de la meta 12.3 de los ODS.
¿Por qué es importante este compromiso?
“Frente a los efectos perjudiciales del cambio climático en la seguridad alimentaria y la nutrición, y las repercusiones negativas de los sistemas agroalimentarios sobre el cambio climático y el medio ambiente en todo el mundo, ha llegado el momento de tomar medidas decisivas para transformar el funcionamiento de nuestros sistemas agroalimentarios y reducir las pérdidas y el desperdicio de alimentos, proporcionando beneficios tanto desde el punto de vista de la mitigación como de la adaptación para asegurar una mejor producción, una mejor nutrición, un mejor medio ambiente y una vida mejor”, declaró Máximo Torero Cullen, Economista Jefe de la FAO. “Será necesario el compromiso de todas las partes interesadas —desde los gobiernos, las empresas del sector privado, los pequeños productores y la sociedad civil, hasta los consumidores— si queremos mitigar el problema de las pérdidas y el desperdicio de alimentos y alcanzar las aspiraciones de la Agenda 2030. Esta es la importancia del compromiso #123 Pledge y de los esfuerzos de la labor de colaboración impulsada por la coalición ‘La comida no es nunca un desperdicio’”.
“Las pérdidas y el desperdicio de alimentos provocan hasta el 10 % de las emisiones de gases de efecto invernadero que calientan el planeta y, sin embargo, pocos países mencionan este hecho en sus planes climáticos nacionales. Ninguno de los principales emisores del mundo figura en esa lista”, afirmó Liz Goodwin, Investigadora Principal y Directora de pérdida y desperdicio de alimentos en el Instituto de Recursos Mundiales, que se desempeña como secretaría de Champions 12.3. “Pese a algunas notas positivas, lamentablemente, el mundo sigue sin estar a la altura. Si no se toman medidas reales para reducir a la mitad las pérdidas y el desperdicio de alimento, será muy difícil resolver la crisis climática”.
“A mitad de camino hacia 2030, ha llegado el momento de tomar medidas de calado mundial. Los países con una dilatada trayectoria de medición y reducción de las pérdidas y el desperdicio de alimentos deberían apoyar a aquellos que inician ese camino. Las empresas deberían incorporar las mejores prácticas en las operaciones que emprenden en todo el mundo. Cada uno de nosotros puede actuar ya, en casa y en el trabajo”, declaró Sheila Aggarwal-Khan, Directora de la División de Economía del PNUMA. “Cada día, cada plato cuenta”.
METAS del compromiso #123 Pledge
Los compromisos contraídos en el marco del #123 Pledge por un total de 123 participantes entre gobiernos, empresas e instituciones en uno de los cinco ámbitos de repercusión para reducir las pérdidas y el desperdicio de alimentos conducen a una reducción sustancial de las emisiones de gases de efecto invernadero.
ÁMBITOS DE REPERCUSIÓN DEL COMPROMISO
- Integrar las pérdidas y el desperdicio de alimentos en las estrategias climáticas nacionales y empresariales.
- Reducir las pérdidas y el desperdicio de alimentos a lo largo de las cadenas de valor.
- Estimular las medidas en los planos nacional y subnacional (es decir, en las ciudades).
- Medir, informar y crear marcos políticos y reglamentarios para la reducción de las pérdidas y el desperdicio de alimentos.
- Apoyar la reducción del desperdicio entre los consumidores mediante la sensibilización, la educación y la creación de las condiciones necesarias para el cambio.
Condiciones para tomar parte en el compromiso
A continuación se enumeran las condiciones para sumarse al compromiso.
- Para poder sumar un compromiso a los ya existentes debe ser sencillo y factible, y estar en consonancia con uno de los cinco ámbitos de repercusión.
- El compromiso debe incluir una perspectiva climática, ser mensurable y atenerse a plazos determinados.
- Los participantes se comprometen a presentar informes anuales de progreso a la coalición “La comida no es nunca un desperdicio” o a Champions 12.3.
- Los informes anuales sobre los progresos deben incluir una perspectiva climática y contribuir a la Evaluación Global mensurable y con plazos determinados, que concluirá en 2023, con la celebración de la COP 28.
Si desea formar parte del compromiso, cumplimente el formulario y envíe un correo electrónico a la dirección que se facilita en las instrucciones adjuntas. No olvide compartir una fotografía del compromiso por escrito y firmado. Le proporcionaremos los instrumentos necesarios para que aumente su difusión en los medios de comunicación social.
Si desea obtener más información y precisiones: Folleto sobre el compromiso para reducir las pérdidas y el desperdicio de alimentos (en inglés)
Si desea participar, cumplimente el FLW Pledge_Form_2023 y envíelo a la dirección de correo electrónico [email protected]
Los compromisos #123 Pledges suscitan cada vez más interés
El Gobierno de los Países Bajos se ha comprometido a luchar activamente para que la estrategia “de la granja a la mesa” sea más ambiciosa a escala de la Unión Europea (UE). Con dicha estrategia se pretende reducir el desperdicio de alimentos en el consumo y en la venta al por menor. Los Países Bajos se esforzarán, en el seno de la UE, por cumplir el objetivo de reducir las pérdidas y el desperdicio de alimentos en toda la cadena alimentaria, en el marco de la estrategia “de la granja a la mesa”, que es el núcleo del Pacto Verde Europeo.
Selina Juul, fundadora del movimiento Stop Wasting Food (Stop Spild Af Mad) y presidenta del Consejo de la organización danesa sin ánimo de lucro del mismo nombre, se comprometió a: “Incrementar la sensibilización nacional e internacional, la educación y el cambio comportamental en relación con las pérdidas y el desperdicio de alimentos generando, al menos, 1 000 difusiones en los medios de comunicación públicos y las redes sociales”.
Miembros de la coalición “La comida no es nunca un desperdicio”:
• Estados nacionales: Estados Unidos de América, Brasil, Indonesia, Italia, Ecuador
• Organismos de las Naciones Unidas e instituciones financieras internacionales: FAO, PNUMA, Banco Mundial, bancos regionales de desarrollo
• ONG: WRI, WRAP, WWF, Global Foodbanking Network
• Instituciones académicas, grupos de reflexión y centros de investigación: Universidad de Wageningen, CGIAR
• Otros: Champions 12.3, Rabobank
RECURSOS ÚTILES
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What is the real cost of food?
International day of awareness of food loss and waste 2021 video
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FAO Goodwill Ambassador Diarmuid Gavin
2022 call to action for reducing food loss and waste