Frenar los efectos de la desertificación, la degradación de la tierra y las sequías en 14 países
La desertificación, la degradación de la tierra y las sequías reducen la productividad y la seguridad alimentaria, perturban las funciones ecosistémicas vitales, tienen una incidencia negativa en la biodiversidad y los recursos hídricos y aumentan las emisiones de carbono y la vulnerabilidad al cambio climático. Cada año, más de la mitad de los terrenos agrícolas de todo el mundo se ven afectados por la degradación de la tierra y se estima que las prácticas insostenibles de gestión territorial ocasionan unas pérdidas de 1 billón de USD en los servicios del suelo.
A pesar de que se trata de una amenaza grave, los responsables de las políticas y los usuarios de la tierra tienen un acceso limitado a los recursos, los instrumentos y la información relativa a enfoques eficaces de gestión sostenible de la tierra (GST). Además, se plantean algunos desafíos como resultado de la falta de coordinación entre las plataformas y las bases de datos para la GST, las lagunas de conocimientos en la esfera de los costos y beneficios de este tipo de gestión, y las capacidades y la sensibilización limitadas de los responsables de las políticas con respecto a la importancia de adoptar enfoques de GST.
El proyecto de apoyo a la adopción de decisiones para la gestión sostenible de la tierra (DS-SLM, por sus siglas en inglés) tiene como objetivo abordar estas cuestiones. Este proyecto se ha ejecutado en 14 países: Argentina, Bangladesh, Bosnia y Herzegovina, China, Colombia, Ecuador, Filipinas, Lesotho, Marruecos, Nigeria, Panamá, Tailandia, Túnez, Turquía y Uzbekistán.
La FAO en acción
En el marco del proyecto DS-SLM, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) ha trabajado con asociados del Fondo para el Medio Ambiente Mundial (FMAM), el Centro para el Desarrollo y el Medio Ambiente, la Reseña mundial de enfoques y tecnologías de la conservación, los ministerios y las partes interesadas locales, en la ejecución de una amplia gama de iniciativas.
Mejorar la salud de los suelos para proteger los medios de vida
El suelo facilita el ciclo de los elementos nutritivos para la vida vegetal y animal, alberga una cuarta parte de la diversidad biológica del planeta y sirve de base para los piensos, el combustible, las fibras y una serie de servicios ecosistémicos. Todos los países participantes en el proyecto han aplicado tecnologías y enfoques de GST en parcelas experimentales y han documentado sus progresos y resultados.
Por ejemplo, los asociados del proyecto en Colombia han cuantificado los beneficios de la GST en terrenos para la ganadería degradados. Su producción de leche ha aumentado de 15 a 45 litros y la reducción de la inversión en insumos agrícolas de fertilizantes y mano de obra ha dado lugar a un aumento del 6 % en la producción de forrajes. De igual manera, la mejora en la salud de los suelos ha provocado una disminución del 23 % en las tierras degradadas de las parcelas experimentales del proyecto.
Aprovechar la tecnología para impulsar la resiliencia y el intercambio de conocimientos
En el marco del proyecto, la FAO ha colaborado con la Reseña mundial de enfoques y tecnologías de la conservación a fin de presentar una plataforma y base de datos de libre acceso en línea para apoyar la adopción de decisiones en materia de desertificación, degradación de la tierra y sequías, así como de GST, que vincula a las redes de información técnica y científica, los asociados en los países y los asociados y programas regionales. Los países participantes en el proyecto han probado y documentado más de 100 tecnologías y enfoques de GST a los que han facilitado el acceso sin restricciones en línea.
Actualmente, la base de datos contiene más de 2 000 prácticas de GST compartidas por 132 países de todo el mundo y constituye un instrumento de incalculable valor para la adopción de decisiones basada en hechos comprobados. La FAO también ha elaborado un curso de aprendizaje electrónico en línea sobre gestión sostenible y restauración de la tierra con vistas a prestar ayuda a los responsables de las políticas, los profesionales y los usuarios de la tierra en la selección, planificación, ejecución y seguimiento de las intervenciones de GST.
Promover las asociaciones con el fin de acelerar los progresos
El proyecto ha fomentado las asociaciones intersectoriales en los países y ha generado experiencias de cooperación mediante las oportunidades de capacitación, la creación de capacidad y el intercambio de conocimientos.
Por ejemplo, los asociados de Filipinas han aprovechado la experiencia de Tailandia en la utilización eficaz de la grama vetiver para luchar contra la erosión del suelo. El establecimiento de asociaciones intersectoriales de múltiples partes interesadas es una manera eficaz de fortalecer las capacidades, poner en común los recursos, aumentar los conocimientos especializados, ampliar el ámbito de aplicación y la eficacia de los proyectos y fomentar un entorno propicio. Todos los proyectos cuyo objeto sea lograr avances sostenibles deben facilitar el establecimiento de asociaciones tanto a escala institucional y nacional, como entre las comunidades locales.
Principales resultados
A fecha de 2019, los 14 países participantes en el proyecto se beneficiaron de la mejora de los conocimientos y la comprensión de la GST y sus ventajas concretas para las partes interesadas y el medio ambiente. Entre los resultados se incluyen:
- Aumentó la producción, preservando al mismo tiempo la salud de los ecosistemas.
- Se incorporaron las prácticas de GST en las políticas y los planes de acción nacionales.
- Se aplicó la GST en determinados territorios y sitios experimentales.
- Se fortalecieron la colaboración y las asociaciones entre países.
- Se aprobaron o elaboraron nuevos enfoques y tecnologías.
- Se elaboraron directrices, herramientas y conjuntos de instrumentos metodológicos pertinentes para cualquier país que trate de luchar contra la desertificación, la degradación de la tierra y las sequías.