El Estado Plurinacional de Bolivia, a través del Ministerio de Medio Ambiente y Aguas, con la Asistencia Técnica de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), inicia acciones conjuntas en la zona del Chaco Boliviano en beneficio de las familias de las comunidades indígenas del pueblo guaraní y comunidades locales.

El proyecto “Fortalecimiento de la Gestión Integral y Sostenible de la Biodiversidad y los Bosques por parte de los Pueblos Indígenas y las Comunidades Locales en Ecosistemas Frágiles de los Bosques Secos del Chaco boliviano”, financiado por el Fondo para el Medio Ambiente Mundial (GEF), llegará de manera directa a alrededor de 10.450 familias de los municipios Monteagudo, Huacareta, Muyupampa, Huacaya, Machareti, Cuevo, Boyuibe y GAIOC Charagua Iyambae.

El propósito del proyecto es conservar los bosques y la biodiversidad de la región del Chaco boliviano a través de acciones conjuntas con las autoridades, instituciones y organizaciones comunitarias.

“Para la FAO es irrenunciable avanzar hacia sistemas agroalimentarios que provean alimentos saludables y nutritivos al alcance de toda la población; pero no podemos lograrlo sin asegurar la sostenibilidad ambiental, la mitigación, la adaptación y la resiliencia climática de las poblaciones más vulnerables. El proyecto en el Chaco es una oportunidad de apoyar a las familias de pequeños productores para potenciar el mantenimiento de los ecosistemas, la producción de alimentos y la gestión integral de los bosques”, dijo el Representante de la FAO en Bolivia, Rodrigo Roubach.

El equipo técnico de la FAO actualmente encara el diagnóstico y formulación participativa de iniciativas innovadoras en los municipios beneficiarios, bajo los criterios de inclusión, equidad de género y generacional.

 “Es importante trabajar y hacer incidencia en el Chaco Boliviano, ya que es una zona que cuenta con gran variedad de biodiversidad y bosque, sin embargo, con el paso del tiempo ha sufrido deterioro, esto a consecuencia de las malas prácticas (actividades humanas) como la deforestación, los chaqueos, el uso de agroquímicos y otros factores, por ello es importante aplicar medidas y promover buenas prácticas de conservación para mejorar sus sistemas de vida, es fundamental encarar acciones conjuntas con nuestras organizaciones y autoridades para  la Gestión Integral y Sostenible de la Biodiversidad y los Bosques (GISBB) a través de la implementación de prácticas para la Gestión Sostenible de la Tierra (GST) y la Gestión Forestal Sostenible (GFS), que contribuyen a la Neutralidad de la Degradación de la Tierra y la conservación de la biodiversidad y los bosques”, mencionó el Coordinador del proyecto, Guido Zambrana.

Lucinda Poti, Mburuvicha (capitán) de la zona de Ivo del municipio de Macharetí, expresó su expectativa de que gracias al proyecto se pueda aplicar buenas prácticas sostenibles para las futuras generaciones. “El proyecto será de mucho beneficio para todas las comunidades, porque siempre se necesita para sostener a la familia, proyectar y dejar para nuestros niños y jóvenes; (nosotros) iniciaremos una iniciativa innovadora de aprovechamiento de productos del bosque para elaborar cosméticos”, dijo.

“La zona se dedica al cultivo del maíz, cría de animales, pero con esta sequía ya no se puede (…) estamos tumbando árboles, se necesita la reforestación, les pido cuidar el bosque”.

El bosque y la biodiversidad del Chaco Boliviano hacen de la región una de las principales áreas de conservación, por lo que es necesario implementar acciones para disminuir los efectos negativos del cambio climático, contribuir a la conservación y garantizar la seguridad alimentaria y nutricional de las familias.

El Señor Ángel Guzmán Curcuy, Capitán de la zona del municipio de San Pablo de Huacareta, habló del cambio que han sufrido sus  sistemas de vida. “Antiguamente yo he trabajado con patrón 18 años, después nos hemos liberado, ahora vivimos en Huirasay que es la primera comunidad que se ha liberado de la esclavitud. En este tiempo, el tema de la sequía hace muy difícil pensar en sembrar, afecta el cambio climático, los chaqueos, las empresas, porque antes corría bastante agua, ahora tenemos que cavar pozos porque no tenemos agua”

“Para evitar este problema tenemos que trabajar todos, pero nosotros como guaraníes respetamos, sabemos conservar las tierras y debemos reforestar nuevamente. Los chacos que sembramos ya no maduran tanto, (por eso) está muy bueno el proyecto que se va a arrancar, nosotros como dirigentes tenemos que apoyar”.

El desafío de las y los productores está en adoptar las buenas prácticas sostenibles, mejorar sus sistemas de producción y que sus productos tengan acceso a mercados, esto implica la transformación y comercialización, generando ingresos económicos para las familias y mejorando sus sistemas de vida.

Algunos objetivos del proyecto son:

• Aumentar la resiliencia de los sistemas de vida (medios de vida) en ecosistemas frágiles de los bosques secos de la región del Chaco boliviano.
• Mejorar la calidad de vida de los pueblos indígenas y campesinos que dependen de los recursos naturales del territorio.
• Avanzar hacia la Neutralidad de la Degradación de la Tierra (NDT).
•  Restaurar áreas afectadas por la degradación. Asegurar la reducción de la degradación y el agotamiento de los recursos naturales

Para esto y con el objetivo de desarrollar acciones conjuntas se vienen sosteniendo acuerdos institucionales con la suscripción de cartas de entendimiento con los municipios para trabajar en cada una de las áreas o componentes del proyecto.

Biodiversidad en Bolivia

El territorio del Estado Plurinacional de Bolivia está entre los 15 países con mayor biodiversidad a nivel mundial. Representa el 0,2% de la superficie mundial y alberga alrededor del 40% de la diversidad biológica mundial. Alberga aproximadamente el 12% del Gran Chaco Americano en los departamentos de Santa Cruz, Chuquisaca y Tarija.  

La región del chaco se encuentra en el sureste de Bolivia, tiene una diversidad sociocultural que tiene presencia de la nación guaraní y comunidades campesinas, dependen de los recursos del suelo y la biodiversidad, sus principales actividades económicas que realizan son la agricultura, la ganadería y la recolección de productos forestales no maderables, tienen su propia forma de explotar los recursos que dan lugar a la producción agroalimentaria, siendo su principal fuente de vida.

Está cubierta por una vegetación voluminosa, es una región de semiárida a subhúmeda, con factores biogeográficos que contribuyen a la adaptación de diversidad de especies.