• En 26 territorios PDET del país, en los cuales FAO hace presencia gracias al convenio establecido con la ART, avanzan las jornadas de incidencia para abordar los temas de Derecho Humano a la Alimentación, agroecología, compras públicas y planes maestros de estructuración. 
• Se trata de una estrategia para incluir estas temáticas en los planes de desarrollo municipal. 
• Es importante trabajar decididamente sobre estos temas desde el nivel nacional y subnacional si se considera qué, 28 de cada 100 hogares se encuentran en inseguridad alimentaria moderada o grave.

La Agencia de Renovación del Territorio de Colombia (ART) y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), en asocio con las alcaldías de municipios PDET, se encuentran desarrollando a lo largo y ancho del país las jornadas territoriales de incidencia para que temas relevantes de la política pública sean incluidos en los planes de desarrollo municipales y a su vez implementados por los tomadores de decisiones locales, temáticas sensibles como: el Derecho Humano a la Alimentación Adecuada - DHAA, agroecología, compras públicas (Ley 2046 de 2020) y Planes Maestros de Estructuración - PME. 

Esta acción que aporta al desarrollo rural integral sostenible y hace que el hambre cero (ODS 2) también sea una realidad para agricultores y agricultoras locales que cultivan y cosechan los alimentos, es una invitación a las comunidades y autoridades territoriales para que en los planes de desarrollo del nivel subnacional, se contemple el fortalecimiento de la producción sostenible de alimentos, como contribución a la apuesta nacional de avanzar en la garantía progresiva del Derecho Humano a la Alimentación Adecuada, uno de los ejes principales del Plan Nacional de Desarrollo. 

Este es un acompañamiento técnico a la gestión territorial, la articulación interinstitucional y al fortalecimiento de ecosistemas de actores comunitarios -en clave de gobernanza-, que garanticen la implementación de una política pública basada en el derecho a la alimentación que le apunte a su vez a la reactivación socioeconómica mediante la transformación de los sistemas agroalimentarios, la dinamización de las organizaciones de agricultura familiar y a la confluencia de voluntades del gobierno, la academia, los privados y la sociedad.

Es importante trabajar decididamente sobre estos temas, puesto que permitirá al Estado colombiano avanzar en el cumplimiento de sus obligaciones frente al derecho a alimentación, más aún, teniendo en cuenta que, 28 de cada 100 hogares se encuentran en inseguridad alimentaria moderada o grave, es decir, que tuvieron que disminuir la cantidad y calidad de los alimentos consumidos debido a la falta de dinero y otros recursos. Esta problemática se agudiza cuando se analiza en contraste con la situación de inseguridad alimentaria que enfrentan los hogares de las zonas rurales (32,5%) y en determinados grupos poblacionales, como la población indígena (46,3%) y la población afrocolombiana. (40,7%).