Construyendo la generación #HambreCero

Unidad 3: Conflictos

El desafío

¿Sabías que más de 65 millones de personas se vieron obligadas a abandonar sus hogares debido a conflictos en 2015? Hoy en día, las personas todavía abandonan sus hogares como consecuencia de los conflictos actuales. Muchos proceden de familias rurales: agricultores, pastores y pescadores. A menudo ya se encuentran en riesgo de pasar hambre o caer en la pobreza. Huyen de sus hogares temiendo por sus vidas. No ven ningún final a los enfrentamientos y ya han perdido, o se arriesgan a perderlo todo. Las personas que se ven obligados a trasladarse a una parte diferente de su propio país se llaman Personas Desplazadas Internamente (PDI), mientras que aquellos que tienen que irse de su propio país son llamados refugiados. La mayoría de los desplazados internos y los refugiados viven en países en desarrollo. Esto es un desafío para los países en desarrollo que ya están luchando para ayudar a sus propias poblaciones.

El hambre, los gobiernos ineficaces y débiles, la circulación del ganado, el intercambio de recursos naturales limitados (especialmente el agua y la tierra) y los impactos del cambio climático pueden conducir a conflictos entre los agricultores locales o entre los lugareños y las personas desplazadas.

 También vale la pena recordar que no todos pueden o quieren huir. ¿Sabías que en la mayoría de los conflictos más del 80% de la población rural se queda atrás? Los agricultores no quieren abandonar su tierra o sus animales. Incluso si es muy difícil llegar hasta ellos, las personas que se quedan atrás también necesitan ayuda para sobrevivir.

¿Qué podemos hacer?

Aunque la FAO no puede detener las guerras y los conflictos, podemos ayudar a los países y a las comunidades de acogida, a las personas que huyen de los conflictos, a las personas que permanecen en las zonas de conflicto y a los países afectados por el conflicto a recuperarse. La FAO apoya a las personas en situaciones de crisis y, una vez que la guerra ha terminado, ayuda a los agricultores a recuperarse para producir alimentos de nuevo. Prestamos asistencia de emergencia a través de transferencias de efectivo, semillas de cultivos, como verduras nutritivas de crecimiento rápido, ganado y herramientas básicas. La FAO está trabajando en algunos de los países más devastados por la guerra, como Siria, donde estamos ayudando a los agricultores a producir alimentos y en Yemen, ayudando a los desplazados internos y a sus comunidades de acogida a iniciar actividades rurales y ganar dinero.

 Ayudamos a aquellos que han huido como consecuencia de conflictos a instalarse en sus nuevos hogares y dar apoyo a las comunidades que acogen a nuevos grupos de personas. Es importante recordar que los refugiados y las personas desplazadas internamente merecen protección, respeto, seguridad y dignidad y que necesitamos permanecer todos unidos contra los actos de discriminación.

La FAO también puede ayudar a prevenir y reducir las tensiones que podrían dar lugar a conflictos. Trabajamos con las comunidades para gestionar mejor sus recursos naturales, alentando a los agricultores a resolver las disputas sobre ganado o recursos naturales, de una manera pacífica a través del debate y la negociación.