El 1 de julio, el Gobierno ruso anunció una prórroga adicional de las exportaciones de trigo libres de impuestos hasta el 1 de julio de 2021. El impuesto a las exportaciones de trigo se suspendió en septiembre de 2016 (FPMA-Políticas alimentarias) por un período de dos años, y posteriormente se extendió dicha supresión hasta el 1 de julio de 2019. El objetivo de la medida es estimular las exportaciones, ya que los suministros internos son abundantes y las perspectivas para la cosecha de trigo de 2019 son favorables, a pesar de la continua preocupación por la sequía en algunas zonas. En la campaña comercial 2018/19 (julio/junio) -recientemente concluida-, las exportaciones de trigo se estiman inicialmente en 35 millones de toneladas, cerca de un 30 por ciento por encima de la media, y se prevé que sigan aumentando en la nueva campaña comercial.