Impacto
Junto con los demás indicadores del ODD 14, ofrece una visión completa de la actividad marina, suministrando a los países datos sobre niveles óptimos de pesca, expansión de la acuicultura, y acceso equitativo y seguro a los recursos acuáticos vivos.
Principales resultados
Una ordenación pesquera eficaz es esencial para asegurar la sostenibilidad medioambiental de la pesca y asegurar un desarrollo equitativo para todas las partes implicadas en la industria pesquera.
Hoy en día, la pesca sostenible representa aproximadamente el 0,1 % del PIB mundial; en ciertas regiones y países menos desarrollados, esta proporción se sitúa entre el 0,5 % y el 1,5 %, lo que refleja la mayor dependencia de la pesca que tienen las personas más pobres del mundo. La gestión sostenible de las poblaciones de peces sigue siendo fundamental para asegurar que la pesca siga generando crecimiento económico y apoyando un desarrollo equitativo, al satisfacer las necesidades actuales sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras para satisfacer las suyas propias.
A medida que sigue creciendo la población mundial, también lo hace la demanda de pescado. Hoy en día, la pesca puede alimentar a más personas que nunca, proporcionando medios de vida a millones de personas en todo el mundo, a la vez que alivia el hambre y la malnutrición. A medida que la pesca y la acuicultura han ido creciendo, también lo han hecho los dividendos económicos del sector y su contribución al crecimiento económico sostenido. A nivel mundial, el valor añadido de este sector ha aumentado de forma constante, en varios puntos porcentuales interanuales. Esto ha dado lugar a una tendencia positiva en la contribución de la pesca sostenible en regiones como África occidental, donde su proporción del PIB aumentó del 0,24 % en 2011 al 0,34 % en 2019.