La FAO estima que hay aproximadamente 39 millones de pescadores trabajando a bordo de 4,56 millones de buques pesqueros dedicados a la pesca de captura. Alrededor de dos tercios de la flota pesquera mundial (2,86 millones de buques) están motorizados y el 82 % de estos buques tienen una eslora inferior a 12 metros y por lo general no tienen cubierta. La mayoría de los buques pesqueros (67 %) están activos en la región de Asia, seguida por África (20 %) y las Américas (10 %). Aproximadamente el 97 % de los buques pesqueros que faenan en todo el mundo tienen una eslora inferior a 24 metros y, por consiguiente, no están cubiertos adecuadamente por acuerdos y convenios acordados a nivel internacional. 

Si bien no se dispone de cifras exactas, según estimaciones prudentes las muertes en el sector pesquero han aumentado a más de 32 000 personas al año. El número de pescadores lesionados o que padecen enfermedades relacionadas con el trabajo es mucho más elevado. Muchos países desarrollados permanecen por encima de la tasa de mortalidad del sector pesquero de 80 muertes por 100 000 pescadores al año, estimada por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) en 1999. El número de accidentes y muertes en el sector pesquero en la mayoría de los países desarrollados está decreciendo lentamente. Varios países en desarrollo han notificado que el número de accidentes en la pesca está aumentando y que el sector pesquero está abordando de manera inadecuada la cuestión relativa a la seguridad en el mar. 

La mayoría de los accidentes y lesiones de pesca ocurren en pesquerías en pequeña escala. Los capitanes y tripulaciones de las embarcaciones en pequeña escala no han recibido a menudo la formación adecuada para ocuparse de sus embarcaciones en condiciones de seguridad, no poseen o no llevan equipo de seguridad, carecen de equipos de navegación y comunicación adecuados, no están suficientemente preparados para situaciones de emergencia en el mar y tienen por lo general un conocimiento limitado sobre reparaciones del motor fueraborda, gestión de riesgos para la seguridad, normas básicas de tráfico marítimo y primeros auxilios en casos de emergencia. 

Entre los accidentes comunes en las operaciones pesqueras que provocan lesiones y muertes se incluyen, por ejemplo, naufragio del buque, incendio a bordo, hombre al agua, enredos con maquinaria o redes, tropiezos o caídas, lesiones provocadas por el manejo de aparejos o pescado capturado, fugas, fallos del motor o el sistema de gobierno, abordajes y exposición a gases tóxicos en espacios cerrados a bordo. 

El reconocimiento de la importancia de mejorar la seguridad en las operaciones pesqueras constituye el primer paso hacia la prevención y mitigación de accidentes. Tanto las administraciones como los pescadores deberían compartir la responsabilidad por la seguridad en el mar en el ámbito del sector pesquero. De la misma manera, la sensibilización respecto de la seguridad, el desarrollo de la capacidad en materia de seguridad en la pesca y la aplicación de prácticas y medidas de seguridad y notificación para hacer de la pesca una profesión más segura deberían ser posibles mediante la colaboración entre los pescadores, sus organizaciones y las administraciones.