En Paraguay, la FAO, entre otros ejes, acompaña iniciativa desde el área de Protección Social.

Los dos botes que Walberto Valdez (37) usa todos los días para adentrarse a las caudalosas aguas en busca de buena pesca, están a orillas del caudaloso río Paraguay, en la ciudad de Villeta. Él, como otros cientos de pescadores de la zona, sale todos los días con la esperanza de conseguir la cantidad necesaria de pescados que le permita una buena venta del producto para mantener adecuadamente a su familia. Su principal preocupación ahora es su pequeña hija de un año y medio. «Hay que trabajar duro para mantener a la familia, sobre todo a los hijos, y nosotros los pescadores hacemos eso todos los días», dice.

«Antes se sacaba mucho, ahora casi nada», cuenta el pescador Walberto, para recordar la época de cuando ayudaba a su padre, también pescador. «Yo desde chico estoy en la pesca, pero desde hace 20 años me dedico a la pesca para mantener a mi familia», comenta para luego indicar que la situación no es buena en general y no solo en la época de la veda pesquera. Además, Walberto habla de la necesidad de ampliar el apoyo estatal a los pescadores, no solo con subsidios, sino con programas que les permita diversificar lo que hacen. «Se habla, por ejemplo, de estanques para cría de peces, y también del proyecto Corredor del Río, que sería muy importante», señaló.

En otra ciudad cercana a Villeta, específicamente en Alberdi, integrantes de una asociación de pescadores cuentan que la pesca está sufriendo una crisis por la cantidad que sacan diariamente. “En algunos días, se vuelve con las manos vacías”, se escucha decir a uno de ellos en una reunión promovida por la municipalidad local. Ellos esperan encontrar una solución y alternativas que les permita mantener a sus familias.

En Pilar, otra ciudad río abajo, la situación no cambia mucho, al menos en unas zonas. La Municipalidad está analizando la posibilidad de generar productos derivados del pescado, instalando una planta procesadora, a modo de apoyar al sector, que también tiene problemas.

Villeta, junto a las ciudades vecinas Villa Oliva, Alberdi, Villa Francay Pilar, son algunos de los municipios que bordean el caudaloso río Paraguay, el segundo mayor de Cuenca del Plata, en América del Sur. Aunque un poco distantes, están conectados por el agua y, ahora, por una nueva ruta asfáltica que trae consigo oportunidades de crecimiento.

Con el objetivo de fortalecer la inclusión económica y productiva de sus pobladores, en el 2022, estas ciudades se embarcaron en el proyecto Corredor del Río, que cuenta con metodología de la iniciativa Hand in Hand (Mano de la mano), de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y Agricultura (FAO), y se desarrolla en el marco del Sistema de Protección Social, coordinado por el Gabinete Social de la Presidencia de la República. A estas localidades, de acuerdo con las perspectivas futuras, se irán sumando otras, como Tacuaras y Guazu Cuá, cuyas autoridades recibieron información sobre la iniciativa.

En Paraguay, la FAO, entre otros ejes, acompaña esta iniciativa desde el área de Protección Social. El representante de la Organización en el país, Agustín Zimmermann, destaca la importante del trabajo en esa línea.

“Los sistemas de Protección Social son fundamentales. Lo que la FAO hace con los actores locales, en este caso con el Gabinete Social, dar asistencia técnica para el diseño de políticas y luego su implementación”, destaca.

El Gobierno de Paraguay ha establecido como prioridades en el área social las acciones estratégicas orientadas a la configuración y desarrollo de un Sistema de Protección Social, que produzca la inclusión social integral, fomente la cohesión social a largo plazo y aumente la eficacia de las políticas sociales.

Ello significa que, priorizando los sectores menos favorecidos, el país debe avanzar hacia la protección del conjunto de la población ante riesgos o contingencias que afecten el acceso a sus derechos fundamentales en materia de educación, salud, empleo, entre otros, para lo cual deben actuar conjuntamente las instituciones comprometidas en esta materia.

La iniciativa Corredor del río comenzó en Villeta, según nos cuenta el intendente de esa ciudad, Teodosio Gómez Ibáñez. “Comenzó en Villeta, invitamos al municipio de Villa Oliva, Alberdi, Villa Franca y Pilar. Es un tramo muy interesante a nivel país, que puede crecer muchísimo”, dijo, confiado en que el proyecto beneficiará a toda la zona.

Una de las principales áreas coincidentes en los municipios que integran el Corredor del Río, es la necesidad de fortalecer el sector pesquero, una de las principales actividades de los pobladores en esos municipios. Hay esperanzas de los pescadores en que la iniciativa podrá mejorar las condiciones en las que están en la actualidad.

“Escuchando el proyecto Corredor del río, y creo que puede traer algo positivo para nosotros, podría ser algo más rentable”, dice Walberto.

Si bien una de las áreas a potenciar es el sector pesquero, otras, como el turismo y el comercio por ser zonas fronterizas, también están en mira.

El intendente de Pilar, Fernando Ramírez, habla de los beneficios que podrá generar el proyecto, si se piensa no darle la espalda al río, sino aprovechando las bondades de la naturaleza.

“El Corredor del Río nos abre una oportunidad muy grande de integración entre varios distritos y también nos da la posibilidad de construir sobre lo que ya tenemos; es decir, construir oportunidades en cuanto al turismo, no darle la espalda al río más bien aprovechar las bondades de la naturaleza y de lo que contamos en la zona”, sostuvo.

En ese mismo sentido, se pronuncia la intendenta de Villa Oliva, Eusebia Marilú Musa, que habla del entusiasmo que tienen.

“Estamos muy entusiasmados y, sobre todo, con fé y esperanza, de que el Corredor del río es una buenísima alternativa para que todos los municipios que estamos sobre el rio Paraguay tengamos más oportunidades y fuentes de trabajo para nuestra gente”, reflexionó la intendenta.

Uno de los ejes del proyecto tiene que ver con la oportunidad de fortalecer el turismo en la zona. Este es uno de los objetivos que tiene, por ejemplo, el municipio de Villa Franca, según nos cuenta el intendente, Rodrigo Leguizamón: “Nosotros estamos apuntando a que sea un lugar turístico, transformar a Villa Franca, También es una zona pesquera, y debemos potenciar la pesca. A través del Corredor del río estamos unidos con otras ciudades, y esperamos grandes cosas a través de este corredor”.

Otra de las prioridades es fortalecer el comercio, como es el interés de la ciudad de Alberdi. Así nos cuenta el intendente local, Nicolás Sotelo.

“El Corredor del río, creo que puede traer muchos beneficios a nuestra comunidad. Creo que con la inclusión de Alberdi con los demás distritos que conformamos, podemos atraer mayor cantidad de gente para el turismo de compra. Creo que con el Corredor del Río la gente va a conocer más porque esta es una zona comercio”, indicó.

Apoyo técnico de la FAO

En enero de 2023, el Director General de la FAO, Sr. QU Dongyu, visitó Paraguay y conoció detalles del proyecto. En aquella ocasión, indicó que la FAO se comprometía a asistir para diseñar un proyecto de factibilidad, el desarrollo de capacidades, la capacitación técnica y, lo más importante, un plan de inversión.

Destacó en ese momento que los municipios “tienen realmente una ubicación estratégica”, que les puede permitir construir una “zona internacional”.

Igualmente, dijo que consideraba que una de las primeras acciones a realizar es “determinar cuáles son las industrias e iniciativas a desarrollar”, y mencionó que como potenciales podrían ser las áreas de la agricultura, la pesca y el turismo, por su proximidad con ciudades fronterizas.

Se debe indicar que para la Iniciativa “Corredor del Río” fueron considerados tres criterios del enfoque Hand in Hand (Mano de la Mano):

* Perfil socioeconómico distrital: subregión con perfil turístico, de servicios, agroindustrial, con potencial en la pesca, y con ciudades de fronteras con la Argentina.

* Proximidad territorial:  subregión para desarrollar proyectos que requieran economías de escala o de integración socioeconómica, cultural, entre otros.

* Integración en bloques: subregión con corredores de exportación, ambientales, turísticos y paisajísticos, que convierten a la zona en atracción para la inversión económica e infraestructura.

Algunos datos

El sistema alimentario actual de Paraguay, a pesar de los intensos avances, aún pone en frente algunos desafíos. Por citar algunos indicadores: 8,7% de la población nacional está en estado de subalimentación y 25% está en situación de inseguridad alimentaria moderada o grave.

Estos hacen que se siga trabajando y fortaleciendo el sistema de protección social, junto con el Gobierno Nacional. Un ejemplo de cómo conectar esfuerzos de cooperación a nivel local y nacional es la Iniciativa Corredor del Río.

El objetivo central de todas las acciones en el marco del sistema de Protección Social en Paraguay y de la FAO a través de la asistencia técnica es con el fin de aumentar los ingresos, mejorar el estado nutricional y el bienestar de las personas en situación de mayor vulnerabilidad y el refuerzo de la resiliencia al cambio climático. Así, esta iniciativa contribuye con acciones concretas y trabajo colaborativo al logro de los objetivos marcados. Alcira Quintana, especialista de la Oficina de la FAO en Paraguay para el área de Protección Social nos resume lo que se pretende: “La búsqueda del sistema tiene que ver con que las personas tengan acceso a alimentación. Que niñas, niños y adolescentes tengan un desarrollo pleno; que las personas en general podamos tener un buen vivir”.

Las aguas corren sobre el río Paraguay y, a la vez, hacen que las energías de los municipios se fortalezcan, la esperanza en la pronta concreción de la iniciativa Corredor del río.