Programa de Manejo Integrado de Producción y Plagas en África
Photo: ©FAO/Olivier Asselin

El programa MIPP se basa en tres objetivos principales:

  • desarrollo de las capacidades agrícolas locales;

  • mejora de la seguridad alimentaria y los medios de vida;

  • concienciación. 

Historia

Finales de la década de 1990: primeros proyectos nacionales

  • El enfoque de las escuelas de campo para agricultores (ECAs), desarrollado por la FAO en el Sudeste asiático en 1989, se comienza a utilizar en los países de África occidental. La primera formación de facilitadores en la región tuvo lugar en Ghana en 1996 y fue llevada a cabo por “formadores de formadores” procedentes de Indonesia y Filipinas. Los facilitadores beneficiarios de la formación provenían de Malí y Burkina Faso.
  • Proyectos piloto en Malí, Burkina Faso y Senegal, que lograron que los agentes agrarios locales se habituasen al enfoque de ECAs aplicado al cultivo de hortalizas y arroz. En los tres países los proyectos piloto captaron el interés de las autoridades nacionales y de las organizaciones campesinas.

2001-2006: Fase I del programa mediante el Proyecto MIPP en África occidental, financiado por los Países Bajos

  • Cerca de 24 000 agricultores de Burkina Faso, Malí y Senegal recibieron formación en prácticas MIPP en las ECAs del Programa entre julio de 2001 y diciembre de 2006.
  • El programa se centró en los cultivos con mayor consumo estimado de plaguicidas y fertilizantes de síntesis: arroz, hortalizas y algodón. Con el apoyo de otras fuentes financieras se comenzaron a incluir otros cultivos como mango, sésamo, jatropha y caupí.

2006-2011: Fase II del programa MIPP en África occidental

  • La Fase II comenzó en 2006 como prolongación del proyecto financiado por los Países Bajos, con la incorporación de Benín a los países de la Fase I.
  • Entre junio de 2006 y diciembre de 2011 las ECAs ofrecieron formación en prácticas MIPP a 86 000 agricultores de Burkina Faso, Malí y Senegal, alcanzando un total de cerca de 112 000 agricultores.
  • El enfoque inicial de MPPI fue evolucionando hacia un enfoque más amplio, cubriendo también otras prácticas como el manejo integrado de la fertilidad del suelo y algunos aspectos de manejo de semillas y de procesamiento y comercialización de productos.
  • Con el fin de satisfacer tanto la demanda local como las peticiones de las autoridades y los colaboradores, se incorporaron nuevos cultivos al programa: legumbres (caupí), mango, sésamo, jatropha, karité, henna y cereales (maíz, sorgo, mijo, fonio).
  • A lo largo de la Fase II se continuó ampliando la lista de donantes y colaboradores del programa.
  • Además de las contribuciones en especie de los países beneficiarios tanto en personal como en equipos, muchas actividades se financiaron de forma conjunta con nuevos colaboradores. Ejemplos de ello son el apoyo de empresas de desmotado de algodón a la formación de facilitadores, o la financiación de ECAs de MIPP por parte de gobiernos locales.
  • Gracias al programa AAACP financiado por la Unión Europea se elaboraron planes de formación en comercialización y calidad de productos, los cuales se pusieron en práctica en Burkina Faso, Malí y Senegal.
  • El estudio de caso “El programa Regional sobre Manejo Integrado de la Producción y las Plagas (MIPP) en África occidental” presenta de forma resumida el programa y los resultados obtenidos hasta 2010.

2012-2016: Fase III – Ampliación del programa a nuevos países e incorporación de nuevos instrumentos

  • La resiliencia frente al clima se ha convertido en un asunto de gran importancia para el cual el enfoque de ECAs resulta muy apropiado. Desde 2010 el Programa ha ofrecido formación en Malí con el objetivo de sensibilizar a los distintos actores a todos los niveles sobre los métodos de adaptación al cambio climático.
  • Las nuevas metodologías de evaluación de riesgos y la puesta en marcha de mecanismos piloto adaptados para vigilar los niveles de contaminantes en aguas provenientes de prácticas agrarias han proporcionado avances muy relevantes para el programa y para la región. Estos progresos constituyen la base para una mayor atención y una mejor gobernanza de los riesgos de plaguicidas en la región y para la toma de decisiones informada en los ministerios y en las agencias reguladoras.
  • Se ha consolidado la colaboración dentro de la región y con otras regiones mediante la promoción de visitas de intercambio a otros países.
  • Otros países africanos están probando de forma gradual el enfoque de ECAs para MIPP: en Tanzania y Zambia se han realizado recientemente actividades de formación de facilitadores en el área de producción de algodón, y en Burundi está previsto el diseño de un nuevo proyecto sobre adaptación al cambio climático mediante ECAs.
  • Los resultados más recientes revelan que la cifra de agricultores de África occidental formados desde el inicio del programa alcanza los 180 000.