Tratado Internacional sobre los Recursos Fitogenéticos para la Alimentación y la Agricultura

El primer depósito de semillas de Svalbard corona los esfuerzos de Serbia por desarrollar un sistema dinámico de conservación para las variedades de cereales locales

Las bolsas de semillas se clasificaron y empacaron en el Instituto de Cultivos de Campo y Vegetales (IFVCNS) en Novi Sad, Serbia. Crédito: Sanja Mikic y Ljiljana Brbaklic / IFVCNS

26/10/2021

Svalbard, Noruega, octubre 2021 – El proyecto deldel Fondo de distribución de beneficios, GRAINEFIT,celebró un hecho sin precedentes con el primer depósito de variedades de cultivos serbios en la Bóveda Global de Semillas de Svalbard.Las 96 accesiones, que incluyen variedades de trigo, centeno, cebada y avena, fueron recogidas en misiones de recolección y recuperadas de bancos de germoplasma.“Los fenómenos meteorológicos extremos durante las temporadas de regeneración amenazan nuestras variedades”, dijo la coordinadora del proyecto Sanja Mikic del Instituto de Cultivos de Campo y Vegetales (IFVCNS),“y con personal técnico limitado para el mantenimiento en nuestro banco nacional de germoplasma, este respaldo de seguridad en Svalbard reduce el riesgo de perder nuestra valiosa colección nacional”.

Serbia cuenta con una rica diversidad de variedades de trigo, que desempeñan un importante papel en el país y constituye un valioso recurso para otros países.“El pan de trigo es una parte indispensable de las comidas diarias y tiene un significado espiritual, cultural, tradicional y nutricional”, explicó Ana Marjanović Jeromela, directora científica de IFVCNS.“Estamos muy orgullosos de contribuir a esta iniciativa global y agradecemos al Fondo de distribución de beneficios su apoyo técnico y financiero. Es nuestro deber salvar todos los valiosos recursos fitogenéticos de Serbia en beneficio de los agricultores de todo el mundo”.

"Los cereales forman parte de la dieta de los pueblos de todo el mundo y son esenciales para la seguridad alimentaria y nutricional.Es vital que conservemos la diversidad genética que todavía está presente en los campos de los agricultores y en la naturaleza”, dijo Kent Nnadozie, Secretario del Tratado Internacional que proporciona el marco legal que impulsó el establecimiento de la Bóveda Global de Semillas."El respaldo de la colección de Serbia en Svalbard proporciona una nivel adicional de seguridad en unas condiciones más seguras de almacenamiento".

Cómo se consiguieron las semillas

Aproximadamente la mitad de las variedades se obtuvieron mediante misiones de recolección en zonas agrícolas remotas. Los servicios nacionales de extensión ayudaron al equipo del proyecto a llegar a los agricultores que todavía cultivan variedades antiguas y variedades locales de los principales cereales.El equipo también documentó los conocimientos sobre las prácticas locales de cultivo y uso de las cosechas, así como los métodos tradicionales de preparación de alimentos.

Además de las misiones de recolección, el proyecto también recuperó variedades de la Colección Nacional de Pequeños Granos que mantiene el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos.Estas variedades se recolectaron originalmente en Serbia, pero ya no estaban presentes en los campos de los agricultores. La identificación y selección de las variedades recuperadas también se basó en los recuerdos de los agricultores sobre lo que ellos o sus familias solían cultivar en el pasado. 

La Sra. Dragica Đorđević, agricultora de Simićevo, le contó al equipo su conexión personal con la variedad que cultiva:"Uno de los primeros recuerdos de mi infancia es el delicioso olor del pan que hacía mi abuela con una variedad autóctona de trigo rojo llamada Crvenka.Cuando crecí, las semillas no se sembraron todos los añosy acabaron perdiéndose en mi familia.Hoy he recuperado las semillas y puedo hacer pan con la misma variedad autóctona para mis propios nietos".

El proyecto del Fondo de distribución de beneficios en Serbia y Bulgaria trabaja con pequeños agricultores, asociaciones de agricultores, organizaciones de la sociedad civil, pequeños empresarios, servicios de extensión, científicos y bancos de germoplasma.El proyecto contribuye a aumentar la diversidad de los materiales de siembra para los agricultores y a proporcionar apoyo técnico a las familias rurales durante toda la temporada.La agricultora participante Olga Bjelobrk, de Ranovac, explicó que "el acceso a recursos fitogenéticos de buena calidad y alto valor nutritivo es esencial para la sostenibilidad y la autosuficiencia de nuestra comunidad local.Nuestros productos de alta calidad elaborados con las antiguas variedades tradicionales se están volviendo cada vez más populares, lo que nos proporciona un ingreso adicional que es importante para asegurar nuestro sustento”.

Esfuerzos de conservación locales a globales

“El Tratado Internacional trabaja para conectar las actividades de conservación a nivel comunitario con iniciativas nacionales, internacionales e incluso globales, como lo demuestran las variedades de trigo en los campos de Serbia que ahora se han depositado en la Bóveda Global de Semillas”, dijo el Secretario Nnadozie."En estos esfuerzos, reconocemos que la regeneración y multiplicación de las semillas es algo costoso, lento y delicado”.

Para hacer frente a retos similares a los experimentados por los institutos serbios, el Fondo Mundial para la Diversidad de Cultivos, en colaboración con la Secretaría del Tratado Internacional, NordGen y el Ministerio noruego de Alimentación y Agricultura, están poniendo en marcha una subvención para apoyar la regeneración y la duplicación de la seguridad en la bóveda mundial de semillas de Svalbard.

Acerca del Fondo de distribución de beneficios

El proyecto de Serbia es uno de los 20 proyectos en curso apoyados por el Cuarto Ciclo del Fondo de distribución de beneficios.El Fondo apoya a los agricultores y a las comunidades indígenas de los países en desarrollo para hacer frente a los desafíos de la pérdida de biodiversidad, el cambio climático y la inseguridad alimentaria, mediante la gestión sostenible y la conservación de los recursos fitogenéticos. Desde su creación hace 10 años, ha beneficiado a más de un millón de personas en más de 60 países en desarrollo. 

 
Las accesiones de la colección serbia en la caja de almacenamiento, en el estante de la Bóveda Global de Semillas de Svalbard. Crédito: NordGen

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