En el marco del Foro Mundial para la Alimentación y la Agricultura (GFFA), expertos abordaron el derechos a la alimentación, centrando la atención en las personas más afectadas por COVID-19.

La alimentación es un derecho humano básico. Sin embargo, 690 millones de personas en el mundo pasan hambre. Nuestro reto es asegurar el derecho a la alimentación de todas las personas, en todo el mundo. Las plantas son parte de la solución

La alimentación es un derecho humano básico. Nuestro reto es asegurar el derecho a la alimentación de todas las personas, en todo el mundo. Las plantas son parte de la solución, ya que son clave para la seguridad alimentaria y el acceso regular a alimentos suficientes, asequibles, seguros y nutritivos para llevar una vida activa. Los gobiernos y las partes interesadas deben tomar acciones para empoderar a los más vulnerables y proteger la sanidad vegetal.

Tener acceso a alimentos nutritivos es un derecho humano, no debería ser un privilegio. Este derecho se realiza cuando las personas tienen acceso a suficientes alimentos nutritivos.

La inocuidad de los alimentos es clave para el derecho a la alimentación, cuya responsabilidad recae en los gobiernos, productores y consumidores. Tal y como señaló el Director General de la FAO, la seguridad alimentaria la inocuidad de los alimentos son derechos básicos de los seres humanos.